Hipotecas con «truco»

Es cada vez más frecuente que bancos y cajas de ahorro diseñen hipotecas atractivas. Pero sus ventajas y beneficios, como la aplicación de intereses menos exigentes, quedan contrarrestados por la obligación de un mayor grado de vinculación del cliente con su entidad, así como una serie de requisitos de obligado cumplimiento que elevan el coste final del producto.

Requisitos ocultos

Los bancos y cajas de ahorro cuentan con hipotecas con factores atractivos, en especial, la aplicación de tipos de interés menos exigentes para sus suscriptores o la rebaja de requisitos para acceder a las mismas. Pero la cara que no muestran, la letra pequeña, debe analizarse con detenimiento, ya que en ocasiones tienen «trucos» que si no inducen a pagar más, tampoco las hacen tan ventajosas como se anuncian en los folletos. Es habitual que estas ofertas tan llamativas escondan uno o varios requisitos que las pueden encarecer entre medio punto y uno, en función de cada propuesta

Algunos créditos hipotecarios, para conceder financiación, exigen un gasto mínimo en las tarjetas de crédito o aportaciones a fondos de inversión y planes de pensiones, e incluso, la domiciliación de la nómina y otros recibos domésticos. Todo ello hace que el coste real sea más caro que el planteado en inicio.

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¿Qué vivienda me puedo permitir?

Después del parón veraniego, seguimos con la pequeña guía sobre cosas a tener en cuenta para encontrar un hogar ideal, ya tenemos claras nuestras preferencias, qué tipo de vivienda estamos buscando y dónde y algunas cosas a comprobar cuando estás visitando una vivienda vamos a intentar responder la pregunta del millón, nunca mejor dicho 🙂 ¿qué vivienda me puedo permitir?.

Dando por hecho que no tenemos todo el dinero para comprar la vivienda en efectivo, vamos a necesitar una hipoteca…por lo que vamos a partir este post en dos partes. Primero veremos ¿qué cuota mensual podemos pagar? y después ¿qué ahorros necesitamos? para hacer frente a la entrada y a los gastos e impuestos derivados de la compra de una vivienda y de la apertura de la hipoteca.

Para tener una idea orientativa de la cuota que podrás pagar mensualmente, suma todos tus ingresos netos anuales y divídelos entre 12, depende de cada uno, y sobre todo de los requisitos del banco que te de la hipoteca, pero como norma general no deberías destinar a la compra de la vivienda más de un 35% de tus ingresos netos mensuales, máximo 40% si tienes ahorros y vas holgado en otros gastos. Con esto ya tienes el importe de cuota al que podrás hacer frente cada mes.

Vamos con los ahorros que necesitarás para comprar una vivienda. Debes tener presente que actualmente las entidades financieras suelen financiar hasta el 80% del valor de tasación de la vivienda (si la vivienda es del mismo banco, en algunos casos puedes encontrar una hipoteca 100% pero ya no abundan como antes). Seguro que habías oído a hablar de hipotecas que daban hasta un 110 o un 120%, olvídate de ellas ya no existen. Considerando el primer caso (hipoteca 80%) necesitarás tener al menos ahorrado el 20% del valor de tasación para pagar la entrada del piso.

Seguimos, porque por desgracia esto no se acaba aquí, nos quedan los gastos e impuestos a pagar por dos conceptos la compra de la vivienda y la constitución de la hipoteca: esto es, el IVA o ITP, el  IAJD, la tasación, la notaría, la gestoría, el registro, los seguros, la comisión de apertura,…

¿Cuánto me va a costar formalizar la hipoteca?

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