La invasion de las lamparitas y las tuberias

He tenido un terrible sueño. Centenares de metros de tubería empezaban a cubrir las paredes de mi casa atravesando paredes y suelos, incluso salían a la calle deslizándose por la fachada. Y lo peor de todo es que cada tubería terminaba en un aplique de pared con dos lamparitas. Tremendo, ¿no? Bueno, pues esto es más o menos lo que han llevado a cabo los arquitectos de Triptyque, una firma franco-brasileña en una casa abandonada en São Paulo.

La instalación pretende recrear con las lamparitas y las tuberías el mismo crecimiento que tendría una planta trepadora expandiéndose en un medio natural.

Vivienda móvil

HABODE es un concepto que parece nacido de dos módulos construidos en la elaboración de perfiles de acero ligero, el tamaño de containeres, donde su fuerza se muestra flexibilidad en el proceso de transporte y puede usar las máquinas estándar de transporte de containeres, y su transparencia, que no se limita a las paredes de acero container común.

La planta es 80m2 plana, con el apoyo de un sistema de base móvil, una rejilla de pilares de madera, y su exterior tiene muchas opciones de acabados, funcionales y estéticas extras, y este concepto tiene la ventaja de prefabricados móviles arquitectura, que permite la movilidad del espacio, podemos traer a casa el lago, la playa, etc.

Puede ser montado en dos días, conectado a la electricidad, agua y alcantarillado.

Sácale una habitación más a tu piso!!

La Casa Mochila creada por Stefan Eberstadt es una nueva forma de ampliar tu espacio vital y… digamos que se encuentra entre el arte y la arquitectura. Se trata de un espacio iluminado a caballo entre un andamio y una escultura minimalista. Es tan «movil» como una «mochila» (de ahí su nombre), esta mini-habitación está destinada a ser una segunda sala que puede ser suspendida de la fachada de cualquier edificio residencial.

El cubo es un espacio vacío, libre de connotaciones y abierto a las necesidades del usuario. Aunque se está dentro de un ambiente privado, uno tiene la impresión de flotar fuera de los confines de la vivienda por encima del espacio público. Dispone de varias aberturas en el interior para vivir con luz natural directa. Existen varias partes de las paredes que se despliegan, con la ayuda de imanes escondidos, en una mesa de trabajo, estanterías o en una plataforma para leer o dormir. La Casa Mochila está suspendida de cables de acero que están anclados al techo o a la fachada del edificio y la caja contenedora es de acero soldado, con un chapado de abedul por el interior. El revestimiento exterior es también de madera contrachapada esta vez especial para uso en exteriores.

Eso si, esto es muy bonito en Estados Unidos donde la ley edificatoria es mucho más permisiva, sobre todo teniendo en cuenta que esto realmente se trata más de una escultura que de una solución permanente. Habría que ves que dicen los Ayuntamientos de por aquí…

NAVES CONVERTIDAS EN LOFTS

Uno de los grandes fenómenos inmobiliarios de la última década ha sido la transformación de antiguas fábricas o viejas naves en lofts. Se trata de antiguos espacios de trabajo amplios, diáfanos, de techos muy altos, sin apenas muros que se convierten en amplias viviendas.

Esta tendencia nació en Estados Unidos hace cuatro décadas cuando los artistas empezaron a ocupar almacenes, fábricas o talleres abandonados en el centro de la ciudad por los que pagaban unas cantidades hasta cinco veces menores que los precios del mercado. Una vez rehabilitados, los propietarios podían utilizarlos como lugar de trabajo y residencia.

En España existen barrios en los que un gran número de fábricas y naves industriales se han convertido en lofts, principalmente en Madrid -Fuencarral, Pradillo- y Barcelona -Poblenou-. El auge de los empleos en que se utilizan las nuevas tecnologías, el teletrabajo y los talleres artesanales han permitido que estos espacios se usen a la vez como hogar y como centro de trabajo. El problema que se ha generado en algunas zonas es que, al no estar preparadas para absorber un gran número de habitantes al haber sido siempre lugares de trabajo y no de residencia, no pueden ofrecer de inmediato servicios como colegios, bibliotecas o centros de salud.

Pero el término loft se ha degradado, y ya no es tan frecuente encontrarse un espacio diáfano, abierto y de altos techos. Ahora, se utiliza para cualquier inmueble que no tenga separación entre habitaciones, así que un estudio con una altura de poco más de dos metros, con una superficie total de 25 metros cuadrados puede anunciarse en las inmobiliarias como un piso tipo loft.