Crisis en el sector inmobiliario estadounidense hasta el 2010
Según informa Moody’s Investors Service, firma de análisis de riesgo, investigación y calificación crediticia global, habrá crisis en el sector inmobiliario estadounidense hasta el 2010, es decir, hasta ese año no se tocará fondo. Esta situación se traduciría en nuevas quiebras de promotores y constructores que deberían esperar demasiado tiempo para poder salvar la situación.
Al igual que ocurre en Europa, las entidades financieras norteamericanas también han cerrado el grifo con sus consecuencias, se construye menos, aumenta el paro y en consecuencia, la morosidad y las ejecuciones hipotecarias, un caos difícil de solucionar.
El informe de Moody’s es bastante pesimista pero se basa en datos también pesimistas, todo gira en torno a las hipotecas subprime concedidas alegremente incluso a quienes mostraban altos riesgos de impagos, se ha desencadenado una brutal crisis inmobiliaria cuyos cimientos eran este tipo de créditos.
El informe de Moody’s contrasta con otros informes que vaticinan que será en este mismo año cuando la situación cambie y la crisis toque fondo, otros vaticinaban que hasta mediados de 2009 no cambiaría la situación y ahora este nuevo informe pone más dramatismo a la crisis y posiblemente afecte al sector, ya se sabe que las previsiones son muy consideradas y a veces se actúa en función de lo que éstas indican.
Quizá la situación cambiaría si finalmente se aprueba el plan de rescate del Gobierno estadounidense dotado con 700.000 millones de dólares destinados a contener la crisis financiera. Son muchos los cambios que deben hacerse y muchas las cuestiones a tener en cuenta, a pesar del plan, la consultora vaticina que algunos constructores no lograrán mantenerse y el plan no servirá evitar que queden en mala posición.
Por el momento, los constructores ya han presentado el informe sobre las pérdidas sufridas sobre el valor de sus terrenos, empresas, etc., desde el año 2006 hasta junio de 2008, las pérdidas se cifran en 25.500 millones de dólares, aunque posiblemente esta cifra ascienda notablemente en los meses sucesivos.